Dos duras pijas encuentran a solitaria campesina lavándose la concha en el rio. Sentada junto al agua se sube el vestido y comienza a limpiar la concha, es intuición femenina el saber que hoy habrá sexo. Justo aparecen dos jóvenes que la conocen, quienes no pierden tiempo al ver que ella seguía mostrando la panocha como si nada. Y así, la solitaria muchacha de la montaña ha encontrado la forma de hacer la vida mas agradable entre tanta naturaleza.
Deja una Respuesta