Cuando el negro la vió entrar supo que haría cualquier cosa para conseguir el puesto. La falda ajustada marca que lleva puesto portaligas, medias oscuras y la camisa apretando las tetas. Hermoso y raro rostro llama aun mas la atención por las gafas. Aunque se hace el tonto cuando le expresa que está dispuesta a todo, sabe a donde va. Ella se pone de pié para comenzar a desnudarse. La lencería es muy sexy, su mirada calienta, el negro afila la pija, unos 25 centímetros de carne en la boca la obligan a babearla toda. Finalmente, acabará dentro de la vagina y le otorga el puesto. August Ames.
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