Ella y sus enormes tetas serán el precisado regalo de cumpleaños del marido. El vestido resalta los pechos de la esposa tetona, para la gran sorpresa le ha vendado los ojos, ya que ha preparado un rico pastel, pero no lo van a comer, sino que el polvo comienza con la loca recibiendo por la concha mientras recostada sobre la mesa las bubis se llenan de la crema. Un lindo regalo de esta hermosa esposa tetona.
Deja una Respuesta