Tienen un salón de masajes donde los clientes se van siempre contentos. Son dos hermanas, dedicadas a relajar a hombres contracturados. Una de rosa transparente otra de blanco trasluciendo pezones. Ellas mismas lo desnuda y le piden que se recueste. Así, las dos se suben sobre el joven que, mira contento como las dos comienzan a tocarle el pene sabiendo que esto va de masajes y fiesta.
Deja una Respuesta