Con el amigo de su marido y en su propia cocina va a ser una esposa traicionera. Ante la ausencia del esposa, y con la visita de uno de los grandes amigos de él, ella no deja pasar la oportunidad de calmar sus deseos sexuales. Siempre anda con la concha caliente, cuando de pronto se baja la remera y esas perfectas tetas asoman, la rubia sonrie a la espera de las manos del caballero que no se hacen esperar. Una reconfortante mamada da inicio a las travesuras que ella siempre hace a escondidas del cornudo con el que se ha casado. Krissy Lynn.
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